Una boda de destino en el país vasco es lo que celebraron Idoia y Fouad el pasado verano. Una pareja de Paris que tenía media familia en Bilbao y media familia en el Líbano. Una mezcla de culturas que se fusionaron ese día para celebrar el amor de dos personas maravillosas. 

Un día increíble que comenzó en el Santuario de Nuestra Señora de la Encina en la localidad de Artziniega y continuó en El Palacio de Ubieta situado en Gordexola.

Siempre digo que lo que de verdad importa en una boda son las emociones, discursos tan emotivos como el del padre de Fouad hacen que todo encaje perfectamente. Para mí es el hilo conductor perfecto. Un recuerdo de verdad. Aunque no podemos dejar de lado la maravilla de decoración a cargo de las compis de Marketing For Lemons, que se encargaron de que todo saliera a las mil maravillas. Ayuda y mucho trabajar en una finca que te hace sentir como en casa, un ambiente de compañerismo inmejorable.

En definitiva, una boda inolvidable para todos los que tuvimos la suerte de acompañar a esta pareja en su día tan especial. Y rematar la fiesta en el exterior para cerrar el día con un broche de oro espectacular, que más se puede pedir.

 Gracias por contar conmigo y encargarme vuestro recuerdo más especial pareja.